El poder de las velas: Un portal de luz

Desde la antigüedad, las velas se han considerado mucho más que simples fuentes de luz, ya que la luz es siempre un camino. Las velas son una fuente de luz, pero son mucho más que eso; son herramientas mágicas.

En su llama reside un profundo misterio, una conexión entre el mundo físico y el espiritual. Son herramientas mágicas llenas de simbolismo y poder, capaces de abrir portales energéticos y canalizar nuestras intenciones hacia el universo.

Al encender una vela, creamos un camino y activamos el poder de uno de los elementos más fuertes: el fuego, invocando la transformación y la manifestación.

El fuego simboliza la purificación, la energía y el cambio. Al encender una vela, invocamos su capacidad para quemar lo viejo y dar paso a lo nuevo, permitiendo que nuestras intenciones se manifiesten tanto en el plano espiritual como en el material.

Es importante saber que cada vela actúa y transmite un mensaje en función de su color, combinado con la intención que establezcas al encenderla.

• • El blanco favorece la purificación y la claridad. Es ideal para rituales de limpieza energética o para empezar de nuevo.
  • El negro es para la protección y la eliminación de las energías negativas. Su fuerza nos envuelve en un escudo protector.
  • El rojo representa la pasión y la fuerza. Este color de vela amplifica el coraje y la intensidad en cualquier intención.
  • El verde representa la prosperidad y la abundancia. Es excelente para rituales orientados al éxito económico o la estabilidad material.
  • El rosa es para el amor y la armonía. Es perfecto para atraer relaciones románticas sanas y equilibradas o para sanar emociones.

La llama de la vela actúa como un puente. Su intensidad y su comportamiento también nos hablan, ya que reflejan el estado de nuestra intención: una llama fuerte indica energía positiva y altas vibraciones, mientras que una llama inestable indica bloqueos y bajas vibraciones.

Las velas en la magia, por sí solas, crean todo un ritual, ya que el mero acto de encenderlas nos permite conectar con el universo. Por ello, es importante hacerlo con un objeto fabricado con materiales procedentes de nuestra Madre Tierra.

Ten en cuenta que la fusión de la cera también tiene su propio lenguaje. Los restos pueden formar figuras que contienen mensajes simbólicos sobre el resultado de tu ritual, por lo que nuestra atención e intención deben centrarse en ellos de principio a fin.
Si se forman círculos o espirales al fundirse la cera, esto representa ciclos que se cierran o energías en movimiento. Las líneas rectas indican un camino claro hacia tu objetivo. Las formas complejas o quebradas sugieren bloqueos o áreas que necesitan más atención en tu vida.

Recuerda observar estos restos con gratitud y curiosidad, ya que contienen información sobre el desarrollo y el resultado de tu ritual. Con las velas, podemos realizar varios rituales sencillos que pueden ayudarnos a acercarnos al objetivo de nuestra intención. Uno de ellos es para la protección; cuando encendemos una vela blanca rodeada de un círculo de sal, visualizamos un escudo protector a nuestro alrededor o alrededor de nuestra casa.

La protección es otro ritual que a menudo deseamos conseguir; para ello, podemos utilizar una vela verde, combinarla con aceite de albahaca y escribir en ella un deseo de prosperidad. Al igual que con las demás, centraremos nuestra intención mientras la encendemos.

Recuerda Una vez que tu vela se haya consumido (o cuando haya finalizado el tiempo del ritual), agradece al fuego y al universo la energía recibida. Desecha los restos de cera respetuosamente, enterrándolos o llevándolos a un lugar natural.

A través de la luz de las velas, nuestras intenciones viajan, tomando forma tanto en el plano espiritual como en el material.

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